domingo, 7 de septiembre de 2008

Pintura

Los árboles de Víctor
Ruy Alfonso Franco

Nunca pensé sino en salir del mal paso
y ponerme a vivir como si fuera necesario.
Hundido un poco o lo bastanteme
dí un par de años para largarme
¿Y mientras tanto?
El pulso sin descanso.
El pulso sin descanso.
(Planeta sur, Enrique Búnbury)
El recuerdo más remoto que tengo de Víctor es de una tarde cualquiera sentado con audífonos escuchando a Queen, al iniciar la clase en un aula de la Facultad de Ciencias Sociales, de la Universidad Autónoma de Sinaloa. Luego de uno o dos semestres más bien insulsos, de Víctor no supe más salvo de su enorme seriedad, y otra tarde, un par de años después, se paró inusitadamente con su enorme seriedad a la puerta de mi casa, con unos cuadros debajo del brazo: estaba ahí para invitarme a una exposición de pintura y dibujo en los pasillos de la escuela por no recuerdo qué motivo.


De entonces a la fecha han pasado unos 12 o 14 años, una película, varios cortos, videoclips y colaboraciones mutuas en tantos proyectos como la inspiración, la afinidad, el capricho y la amistad profunda nos ha permitido. De entonces a la fecha Víctor pasó de ser un alumno de enorme seriedad y muda existencia, a un entrañable amigo de explosiva creatividad, de varias exposiciones colectivas e individuales, de cuadros maltrechos en sus inicios a otros de gran expresividad; de admirar a Víctor por su enorme seriedad, paciencia y fidelidad, a descubrir en él a un apasionado artista con fogoso talento que enciende a quien se acerca.

De entonces a la fecha vi que su enorme seriedad era una coraza contra los intrusos de su mundo particular y que en éste hay de todo menos el ostracismo con que los demás lo suelen pensar; que tiene un sentido del humor asesino y que sus sentimientos están en constante ebullición, que cuando se queda mirando a la nada sin hablar ni parpadear, no es que esté redimensionando su personal filosofía, sino que se apaga sencillamente antes que perder el tiempo en naderías. De esos instantes, tal vez, luego surgen cuadros de apabullante introspección, de colores que estallan y pasman, de líneas geométricas que adivinan carreteras arteriales del corazón, de guiños, de ojos grandotes, de trazos rudos y pincelazos discretos que arrebujan el alma.



De entonces a la fecha me consta que Víctor Higadera es un artista que ilumina con sus cuadros delirantes; que Víctor Higadera crece como un árbol fuerte de frondosas ramas e idílicas raíces que salen de sus entrañas; que llena de orgullo trabajar a su lado, de encontrarlo en el camino, de saberlo roble, de verlo raíz, de cubrirse con su ramaje fraterno. De entonces a la fecha Víctor Higadera está hoy aquí con sus árboles amigos, a festejar la naturaleza de la existencia, de los profundos vericuetos de sus heridas y alegrías, las de todos que ven en sus cuadros rotundas huellas, con queso y añejo.



Pinturas: Víctor Higadera
Fotografías: RAF

10 comentarios:

adrichabat dijo...

Quién mas podría expresar de una manera tan tangible la obra de tu amigo felicidades por su obra y por contarte entre sus amistades.
Un abrazo para ti
Siempre es un gusto leerte.
Adri

Ruy Alfonso Franco dijo...

¡Hola Adri querida! ¡Qué alegría me da leerte! He echado vueltas a tu página en Blogguer, pero ni tus luces. De veras que me mucho gusto tenerte de nueva cuenta por aquí.

A mí también me dio mucho orgullo asistir a la exposición de mi amigo y contribuir aunque sea un poquito en dar a conocer su obra a través de mi crónica, que en serio que vale sus pinturas.

Posteriormnte, pero en Space, subiré una serie fotográfica que le hice a Víctor con motivo de su exposición. Ahora aquí en Blogguer sólo he colocado unas tres o cuatro fotos. Así que Adri, tal vez para la próxima semana ya estará esa serie en tal sitio, ojalá puedas verla.

Adri, por favor, no te alejes tanto y mantenme al tanto de ti.

Un enorme abrazo, amiga querida.

Jorge Fax dijo...

hola Cid campeador visual...

me da gusto visitarte.

el chamaco en cuestion no ha expuesto en mexico d.f.?

me parecio que en un lugar donde el esta se parece mucho a un cuarto de muestra de la biblioteca de mexico Jose Vasconcelos (la viejita no la chafa y fallida).

saludines del poeta en pie de guerra "inspirativa"

Ruy Alfonso Franco dijo...

Hola poeta del alma, el gusto es mío por tenerte por acá.

Fíjate que Víctor no ha expuesto en México, tú sabes, cuestión de contactos. Ahí si tú conoces alguien interesado en ver la obra de este artista, avisas.

Poeta, un abrazo costero; se te extraña en el congal, creo que eras el único preocupado por la imagen del mismo y ya sin tu contribución, pues como que no.

Jorge Fax dijo...

tienes razon...
ojala y mi musa inspiradora no se fije mucho en os dimes y diretes de nuestra gloriosa "ciberpocilga querida"... te mandare detalles luego via msn.

de contactos seria cuestion de hablar con los que manejan las exposiciones en la biblioteca de Mexico o en todo caso con los que manejan difusion en el museo de la imagen...
cuestion de probar y dar detalles acerca de la obra de tu "cuais"

un abrazo.

Ruy Alfonso Franco dijo...

Hecho.

Otro de regreso.

Kanina Dioz dijo...

Me gusta el elemento que ha adoptado par desarrollar su arte, la ansiedad que brotan de las raices,la intensidad que nace en el corazón, la grandeza de raiz a copa que nos muestra, el apacible blanco sustiyuyendo al verde de las hojas.
Y por acá cuando expone?
Saludos costeros Querido Paisano.

Ruy Alfonso Franco dijo...

Sí, es maravillosa la manera que Víctor tiene para expresarse. Me gusta la manera como tú le describes su más reciente trabajo: Árboles.

Fíjate que, precisamente, hoy por la mañana me comentó Víctor que espera arreglar unos detalles para montar su obra en Culiacán; no sé, tal vez y concrete algo para Los Mochis. Depende mucho de las invitaciones que le hagan.

Ahí si tú conoces a alguien dentro del medio cultural que se interese por el trabajo de Víctor, es cuestión de que lo diga.

Ivytaste dijo...

Me llama la atención los colores, las formas en los cuadros, que buen amigo eres Ruy, darle difusion , en buena hora por los dos.

Un Beso
Ivy

Ruy Alfonso Franco dijo...

Gracias Ivy, es lo menos que uno puede hacer no sólo por los amigos, sino por el arte mismo. Creo en él y en su obra.

Gracias Ivy linda por ser tan gentil siempre conmigo.